La Marquesa de Yolombó por Carlos Madrigal
La marquesa de Yolombó por
Carlos Madrigal.
La marquesa de Yolombó por Carlos Madrigal.
Te voy a dar mis comentarios de la lectura de la marquesa de Yolombó.
Por supuesto que no son análisis literarios, ni sociológicos, ni políticos, es simplemente una descripción de mis emociones al leerlo.
Tenía mucha curiosidad de leer a Carrasquilla primero que todo, sobre todo a la marquesa de Yolombo. Este Carrasquilla comienza metiéndolo a uno en ese pasado,ese que es antes de la independencia del país, casi ninguno sabíamos de eso, no teníamos noticia que era lo que pasaba antes de la independencia y entonces me pareció, no sabía si era que me iba a contar un cuento, entonces empieza describiendo ese ámbito muy detalladamente para luego ir introduciendo los personajes, me parece cómo muy bien hecho eso, se deleita creando toda esa época, me va dando como una ansiedad de la tal marquesa porque todavía como que no habla de un personaje en especial pero aunque al principio parece muy difícil entender ese español antiguo, va a pareciendo, aunque a uno le parezca raro, va mostrando todas esas formas distintas de hablar de los negros, los mestizos, los españoles pues uno a la larga va entendiendo todo sin saber el significado exacto de algunos de esos arcaísmos, eso me parece muy, muy genial, no sé si a todo el mundo le paso eso.
Es de es un ambiente muy religioso, supersticioso, mágico, ahí se ve pues el servilismo de los negros y los indios a los blancos y de los blancos al rey, súper impresionante y con la aparición ya de Bárbara, todavía sin saber que iba a ser la marquesa, comienza pues la ficción que es intencional de Carrasquilla al crear un personaje femenino que se sale de los estándares de esa sociedad o sea que emancipa a la mujer y ahí empieza la novela y entonces es la historia de una heroína, él la convierte en una heroína, porque, porque es tan feminista que ni siquiera la pone hermosa, bonita, porque no lo necesita, creo que a veces, no es tanto por feminismo sino por romper con ese tradicionalismo obtuso que rebajaba tanto a la mujer.
La obra pues va pues incresciendo, así como un concierto, inclusive en un momento el escritor le da como gusto al lector consiguiéndole pues marido a la marquesa y en otro momento lo desconcierta con el final, o sea que me pareció emocionante haber leído ese libro.