mañana en la batalla piensa en mi
“Mañana en la batalla piensa en mí”
Javier Marías
Javier Marías (Madrid, España, 1951)
El escritor nos presenta un relato que oscila entre la cordura, la locura y la obsesión. Su protagonista, el escritor fantasma, guionista con relativo éxito, Víctor Francés, tiene una cita con Marta Téllez en su casa. Ella es una atractiva mujer casada con Deán y madre de un niño de dos años. Este encuentro promete, por cuanto, el marido se encuentra en Londres. Hay expectativa y tensión sexual. Pero lo inesperado domina la velada, Marta se comienza a sentir mal, y poco a poco, con Víctor como testigo, agoniza y muere a su lado, en la cama matrimonial. El pequeño, duerme en una habitación cercana. ¿Qué hará Víctor ante ese panorama inesperado que lo desarma por completo?
El relato, en primera persona, se convierte en una larga reflexión de ideas que se sobreponen unas a las otras, de manera hilarante, sin dar tregua al lector. De hecho, son muchos los puntos y seguido que emplea el autor. Las oraciones se entrelazan para contarnos impresiones, descripciones, suposiciones, imaginaciones. Después de esa noche…Todo puede pasar. Solo quedan interrogantes que atormentarán a varios personajes. La frustración de la infidelidad que no se consumó se vuelve una constante en la vida de Víctor.
‘Seguimos los dos aquí, en la misma postura y en el mismo espacio, aún la noto; nada ha cambiado y sin embargo ha cambiado todo, lo sé y no lo entiendo. No sé por qué yo estoy vivo y ella está muerta, no sé en qué consiste lo uno y lo otro. Ahora no entiendo bien estos términos’. (pág.50)
El personaje Víctor vive obsesionado con lo que ocurrió aquella noche y logra por intermedio de otro escritor, Ruibérriz Torres, conocer al padre de Marta y a su hermana Luisa. También logrará conocer al viudo Deán. Al comienzo, ellos no saben quién es él. El hombre que estuvo al lado de Marta en su agonía.
Él desea conocerlos, sin ánimo de vengarse, ni expiar una culpa, ni ahuyentar su miedo. “no me mueve ninguna de esas cosas que son las que siempre nos mueven, averiguar, salvar, conseguir, suplantar, perjudicar, usurpar, vengar, expiar, proteger o tranquilizar y ahuyentar; tirármela”. (pág.138)
El Sr. Téllez, un hombre influyente pero ya en el ocaso de su vida, necesita a un escritor fantasma para que le prepare un discurso muy especial a ‘El Solitario’, Only the lonely. Víctor se instalará en casa de Téllez para ir haciendo este trabajo. Sin embargo, es cuando ya lo ha terminado, que se entera de que el discurso ya no será necesario y seguro lo engavetarán.
Una conversación entre Víctor y Ruibérriz, despierta suspicacia. Éste último aconseja a Víctor que esté más pendiente de su ex mujer Celia porque la han visto con extrañas compañías y en lugares de mala reputación. Eso basta para que otra obsesión domine su mente. Una noche sale y al ver las prostitutas de la calle, cree reconocer a Celia y la sube a su carro. Ella dice que se llama Victoria. Sin embargo, él la comparará constantemente con Celia y fantaseará. Luego llamará por teléfono a Celia, y hasta se aparecerá en su casa en la madrugada con las llaves que aún guardaba. Lo que descubrirá, será definitivo, ella ya tiene otra pareja con la que tiene planes de boda.
Javier Marías hace gala de un manejo del idioma muy preciso, emplea un vocabulario extenso y bien trabajado. Sabe crear tensión y logra moldear a Víctor como un personaje complicado psicológicamente que confunde e intriga al lector constantemente. Tal vez haya algunas tramas secundarias que no son necesarias.
Mañana en la Batalla piensa en mí, es una novela sobre el engaño, la infidelidad, el azar y sus consecuencias. Víctor logrará conversar con Luisa, hermana de Marta y revelarle quién es. Le contará los últimos momentos de la vida de la difunta. Pero, esto ocurre, luego de seguirla a escondidas, por las calles madrileñas, detallando su cuerpo y hasta opinando sobre qué ropa le queda mejor. Víctor es un voyeurista.
Luisa acuerda con Víctor que va a contarle a Eduardo Deán, sobre su existencia y todo lo que realmente pasó aquella noche de una infidelidad no consumada. Eduardo cita a Víctor en el apartamento de Conde de la Cimera, que éste ya conoce muy bien. Aquí es cuando el escritor le da un increíble protagonismo al viudo, quien hasta los momentos había sido una especie de culpable silente, por no haber estado allí cuando Marta lo necesitó, por haberla descuidado. Deán cuenta por qué viajó a Londres. Esa historia implica a una amante, un aborto imaginario y una muerte ¿accidental?
El escritor ha jugado su última carta, Eduardo vivirá en el remordimiento con dos muertes a cuestas. Víctor no se siente culpable. Cierra un capítulo. “Vivir en el engaño es fácil y nuestra condición natural”, es su reflexión.
Mañana en la batalla piensa en mí fue merecedora del premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos 1995, de los premios Fastenrath 1995, Fémina Étranger 1996 y Letterario Internazionale Mondello-Città di Palermo 1998.